Para ilustrar esta tirada imaginemos el caso de una joven a punto de contraer matrimonio, la cual se pregunta sobre el desarrollo de su futuro en ese sentido, el cual, ya de entrada, intuye como complicado, según nos confiesa.

Sacando, o levantando, cada una de las cartas de izquierda a derecha en sentido contrario a las agujas del reloj, vemos que la carta que representa a la consultante, o Casa I, es el Arcano XV ‘‘El Diablo’’ invertida, lo que ya nos da una idea del estado personal presente de la misma, anidando en ella profundos temores, o quizás traumas, de tipo sexual, ya que, básicamente, ella teme el fracaso de su futuro matrimonio por el ‘‘terror’’ que el sexo le infunde. Sin embargo, advertimos que debido a que esta carta representa también una liberación, una ruptura de cadenas, hay una perspectiva positiva que irá cambiando a mejor con el paso del tiempo.

En la Casa II, lo material, encontramos ‘‘El Carro’’, lo que indica que va a haber un traslado debido al trabajo, o que éste va a basarse en casi continuos desplazamientos. Esta carta augura satisfacciones de tipo económico, aunque siempre deben evitar las tareas que supongan rutina o que corten la libertad de movimiento de la pareja.

El Arcano VI, ‘‘Los Enamorados’’, influencia la Casa III, lo que nos da una impresión muy favorable con respecto al entendimiento mental en la pareja, así como una continua evolución o crecimiento interno a ambos, ya que van a tener que enfrentarse a una serie de disyuntivas que si bien va a tener dinamismo a la vida en común, les va a poner en el ‘‘brete’’ de elecciones difíciles. La consultante deberá evitar a toda costa la intromisión de los familiares en su vida matrimonial, así como la convivencia con hermanos o parientes cercanos en su hogar de casada.

‘‘El Mago’’, Arcano I, ocupa la Casa IV, el hogar, lo que es índice de un comienzo, y final, de la vida doméstica muy favorable. La consultante logrará comodidades, y eso le dará, desde el principio, seguridad y reafirmación interna. No obstante, la consultante deberá dejar atrás su pasado, especialmente todo lo que le ‘‘ate’’ al hogar paterno y no tiene que anidar en ella ningún sentimiento de culpabilidad por haberlo dejado.

‘‘La Rueda de la Fortuna’’, el Arcano X, se encuentra en la Casa V, que con respecto a los hijos indica fertilidad, aunque no vendrán de inmediato ya que la carta está invertida. Durante su vida matrimonial, la consultante tendrá algunos golpes de suerte que va a influir sobre la vida económica. Habrá fortuna en las inversiones, así como en algún juego de azar (aunque éste no es muy recomendable anunciarlo). Los mejores momentos van a coincidir con la llegada de los hijos.

En la Casa VI, el Arcano XIII ‘‘La Estrella’’ invertida, indica la necesidad de prestar más atención a la salud física. La aparición de la desgana o cansancio en el trabajo, obligará a permitirse etapas de descanso, así como introducir en aquél elementos de distracción o que le alejen de la rutina. De todas formas, ‘‘La Estrella’’ favorece mucho el área laboral.

El domicilio propio del matrimonio, la Casa VII, está ocupada por el Arcano XIII, ‘‘La Muerte’’ invertida, lo que anuncia una grave crisis hacia la mitad de su vida conyugal, lo que va a significar un verdadero giro en los acontecimientos; cabe la posibilidad de viudedad.

‘‘El Mundo’’, Arcano XXI, está en la Casa VIII, y como éste es el anuncio de los augurios felices, la consultante es un ser más afortunado de lo que cree ella misma; va a encontrar en su nuevo estado una plenitud que no goza en el presente. Y por eso, no debe estar tan inquieta ante la posibilidad del cambio.

En la Casa IX, se encuentra ‘‘El Sumo Sacerdote’’ invertida, que va a ocasionar algunos disgustos a la consultante que vendrán de la mano de alguien que ella cree como superior o autoridad (podría ser su propio padre, u obstáculos procedentes de éste). Debe huir de toda aquella persona que le aconseje negativamente.

En la Casa X, ‘‘La Luna’’, denota que la consultante posee una personalidad cambiante y poco consistente, especialmente ante los ojos de los demás. No obstante, es una persona de un gran talento creativo, lo que le ayudará a ganarse la confianza de aquéllos. En su camino hacia el logro de sus objetivos, va a encontrarse con personas poco honestas, traicioneras y envidiosas de su status social.

El Arcano XI, ‘‘El Colgado’’, ocupa la Casa XI, que al ser el domicilio de la amistad y de los aliados, no le favorece demasiado puesto que es indicativa de la condescendencia que la consultante habrá de tener con algunas personas del entorno. Ella podría cambiar la situación si se lo propone, pero se verá obligada a esa especie de autosacrificio por las circunstancias. En la última etapa de su vida dedicará parte de su vida y dinero, a acciones filantrópicas o humanitarias.

Y en la Casa XII, se encuentra ‘‘El Ermitaño’’, que nos indica que la consultante va a saber utilizar sus experiencias para vencer las turbaciones que le ocasionarán tanto las influencias externas, como sus propios temores internos. La prudencia y cautela irán en aumento con la edad. Debe alejarse de la tentación de la soledad, ya que, de ser así, esa actitud repercutiría negativamente sobre su equilibro físico y mental.